Un estudio publicado en el American Journal of Geriatric Psychiatry reveló que las personas adultas que consumen cantidades moderadas de alcohol tienen menos probabilidades de desarrollar demencia y otras enfermedades relacionadas.
La investigación, dirigida por la Doctora Kaarin Anstey del Centro de Investigación de Salud Mental de la Universidad Nacional de Australia, halló que los bebedores moderados son menos propensos de desarrollar Alzheimer que aquellos que no consumen licor. De igual forma un 25 por ciento menos proclives a padecer demencia vascular y un 26 por ciento menos propensos a desarrollar demencia.
Estudios recientes afirman que el uso moderado de alcohol que puede definirse como un trago o hasta 3 o 4 tragos, puede disminuir el riesgo de contraer Alzheimer y otras demencias. En un estudio con personas de la edad de 60 y más, el consumo de alcohol se asociaba con un riesgo más bajo de 34% de contraer la demencia durante un periodo de 16 años.
El estudio tomó como muestra a 10.000 personas a nivel mundial y la doctora Anstey afirmó que no estaba claro por qué la ingesta moderada de alcohol reducía el riesgo de demencia, pero sugirió que podría estar vinculado con un efecto protector de la bebida sobre la inflamación y la enfermedad cardíaca o con los beneficios de la interacción social asociados con el alcohol.
Un estudio que tomó como muestra a 2258 personas sin demenciaencontró que la adhesión a una dieta tradicional mediterránea queincluye el consumo moderado de alcohol, resultó en una reducciónsignificativa del riesgo de Alzheimer.
Tomar moderadamente se ha asociado con una reducción deaproximadamente 50% del riesgo de la combinación de demencia y eldeterioro leve cognoscitivo
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