Es una leguminoza muy nutritiva, originaria de Europa central. Los españoles siempre lo han tenido en mucho aprecio y fueron ellos quienes iniciaron su cultivo en el norte de América del Sur.
La forma de su semilla, en la que los antiguos vieron a cabeza de un carnero (Aries), originó su nombre científico, Cicer arietinum. La calidad de los garbanzos se mide por el número de granos que entran en una onza (30 g). Son garbanzos selectos cuando totalizan menos de 30 piezas; corrientes, cuando hay entre 50 y 70 e inferiores, cuando son más de 70 por onza.
Propiedades medicinales
Nutritivos, laxantes, diuréticos, galactógenos (favorece la secreción láctea). En las infecciones urinarias, el uso de una decocción de garbanzos (100 gr. para un litro de agua, previamente remojados) como agua de uso desinflama y calma el ardor. ¡Y para bajar el nivel de colesterol son maravillosos!
Para favorecer la secreción de leche materna, es conveniente comerse una taza de garbanzos cocidos diariamente. La pulpa machacada de esta leguminosa ayuda a contener las diarreas y para controlar las hemorragias de la nariz, se introducen en las fosas nasales hisopos de algodón humedecidos en el líquido en el que se cocieron los garbanzos.
Información nutricional:
- Calorías: 244
- Proteínas: 19 gr.
- Hidratos de Carbono: 55 gr.
- Fibra: 11 gr.
- Calcio: 160 mg.
- Potasio: 1.000 mg.
- Grasas saludables: 2 gr.
- Hierro: 3 mg.
- Zinc: 6 mg.
- Vitaminas (B1, B2, B6, C) y Magnesio
Ventajas del garbanzo:
En el garbanzo tenemos una fuente de proteína vegetal y carbohidratos complejos virtualmente desaprovechada. Combinándolo en la misma comida con otra fuente de proteína como germen de trigo, frijoles, habas, cacahuates o lácteos, se obtiene una proteína comparable con la de las carnes.
A esto hay que agregar su escasez en grasas y su aportación de fibra dietética y vitaminas (especialmente la B3 y el ácido fólico). Su relación sodio-potasio es excelente, y se le puede considerar entre las mejores fuentes de potasio, superior a las nueces, el aguacate y las papas. Es, asimismo, rico en hierro; tanto así, que una taza de garbanzos cocidos proporciona un tercio de las necesidades diarias de la mujer y 70 por ciento de las del hombre.
Desventajas:
Los garbanzos, al igual que las demás leguminosas, pueden ocasionar flatulencia, lo cual puede disminuirse poniendo los garbanzos en remojo antes de cocerlos. Igualmente, los garbanzos abundan en purinas, sustancias que el organismo desecha como ácido úrico y que pueden provocar ataques de gota.
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