La levadura de cerveza ha desempeñado un destacado papel en la alimentación humana desde hace milenios, cuando se descubrió que gracias a su poder de fermentación se podía producir pan y cerveza.
En ambos procesos, la levadura produce un gas, el bióxido de carbono que infla el pan y forma las burbujas de la cerveza.
En su estado natural, la levadura de cerveza es un conglomerado de hongos microscópicos (Saccharomyces cereviceae, para los científicos), que al ser desecados se convierten en el polvo o las tabletas que nos son familiares. Durante el citado proceso de fermentación, la levadura también produce proteínas, vitaminas del Complejo B y concentra minerales valiosos, que elevan el poder nutricional del pan y la cerveza. Sin embargo, sólo hasta principios del siglo XX es que se e desecó y comenzó a utilizar como un complemento de la alimentación.
Propiedades medicinales
La levadura de cerveza es nutritiva y reconstituyente. El uso de la levadura de cerveza como apoyo nutricional en el tratamiento de la hepatitis es proverbial entre los buenos médicos. Las mejorías obtenidas y el acortamiento en el período de convalecencia en estos casos han sido espectaculares, sobre todo cuando se han utilizado dosis masivas de levadura.

Ventajas de la levadura de cerveza
En la levadura de cerveza hay más que un complemento alimenticio, hay un superalimento. Tiene casi el doble de proteína que las carnes rojas, e incluso se compara ventajosamente con las mejores mezclas proteicas o de aminoácidos importadas, y resulta mucho más económica.
El valor biológico de la proteína de la levadura (87%) es comparable con la de la carne de ternera (84%), y apenas inferior a la del huevo (97%), por lo que puede afirmarse que ninguna otra proteína vegetal se le compara, ni siquiera la de la soya (75%) o la del germen de trigo (67%). Su contenido de grasa es mínimo. no contiene colesterol y sus carbohidratos son complejos, de manera que no resulta tan engordante como los alimentos ricos en azúcares. Es más, puede consumirse (con moderación) aun si se está a dieta, y de hecho debe hacerse pues las dietas rigurosas o muy frecuentes favorecen la desnutrición.
Un par de cucharadas o una docena de tabletas de levadura de cerveza al día bastan para satisfacer las necesidades habituales de las vitaminas del Complejo B (con excepción de la B12 y la biotina), así como de minerales tan valiosos como el potasio, el fósfoto, el cobre y el zinc. Igualmente proporciona buena parte de nuestros requerimientos de hierro, magnesio, cromo y selenio.
Desventajas
Este alimento es sumamente rico en fósforo, lo cual es bueno, pero si se ingiere de manera habitual y generosamente, hace necesario aumentar también el consumo de calcio.
El calcio y el fósforo comparten algunas funciones, pero cuando hay un predominio de este último en la alimentación común, en especial si se beben refrescos de cola), la excreción del calcio aumenta, pudiendo producirse una descalsificación. Esta eventualidad puede prevenirse consumiendo más leche y/o productos lácteos, o bien usando diariamente un complemento rico en calcio.
Otro posible inconveniente de la levadura de cerveza es su riqueza en ácidos nucleicos. Según los investigadores, los ácidos nucleicos aumentan las energías, favorecen la producción corporal de proteínas y aminoran el ritmo de envejecimiento. Obviamente todo esto es benéfico, pero el desecho metabólico de los ácidos nucleicos es nada menos que el ácido úrico, al cual temen las personas propensas al reumatismo y la gota. Si usted se halla en esta condición, consulte a su médico sobre la conveniencia de ingerir levadura de cerveza.
9 comentarios
Espero pronta respuesta.
Att.
Josefina.
Muchas Gracias