La difusión de cientos de miles de documentos de la diplomacia estadounidense ha revelado la postura de presidentes e importantes figuras políticas con respecto a Venezuela y el presidente Chávez.
Estados Unidos y Brasil afirmaron en diferentes cables diplomáticos que Chávez es un perro que “ladra y no muerde”.
La posición de algunos políticos brasileños con respecto a la figura de Chávez se develó, el ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, Celso Amorim, afirma en un mensaje de marzo de 2007 que "la orientación política de Hugo Chávez no es la de Brasil, pero los brasileños no se sienten amenazados por Chávez. El aislamiento no es una solución con Chávez".

Por su parte, el ministro de Defensa Nelson Jobim lo ve de una manera diferente, ya que lo considera una “nueva amenaza” para la estabilidad de la región.
"Los brasileños consideran plausible una incursión militar de Chávez en un país vecino, por su carácter imprevisible", afirma un telegrama secreto de 2008. Por eso se creó un consejo de defensa sudamericano que sirve para "conducir a Venezuela y otros países de la región a una organización común que Brasil pueda controlar".
Según algunos datos revelados, Estados Unidos y Brasil compiten por la influencia en América Latina. "Brasil estima estar comprometido en una competencia conEstados Unidos y desconfía de las intenciones estadounidenses. (...) Brasil tiene una necesidad casi neurótica de ser igual a Estados Unidos yde ser percibido como tal", afirma un mensaje secreto de noviembre de 2009.