Cada vez son más las bebidas gaseosas que ofrecen en el mercado con eladjetivo "light", de ligero: bajo en calorías, en azúcar y, por lotanto, menos perjudiciales para la salud. Sin embargo, un reciente estudioindica que las personas que consumen este tipo de bebidas tienen 60% másposibilidades de sufrir un accidente cerebro vascular que aquellos que no lasconsumen.

La opción light no es la más adecuada. "Esto podría indicar que lasbebidas diet no serían el sustituto óptimo de las bebidas azucaradas paraprotegerse contra efectos vasculares", señaló Hannah Gardener,investigadora de la Universidad de Miami y autor del experimento, según publicóLa Tercera.
Para el estudio, los investigadores siguieron los hábitos de 3.298participantes con una edad media de 40 años, a quienes les preguntaron qué tipode refrescos bebían (con azúcar, sin azúcar, ambas o ninguna) y en quécantidades.
También tuvieron en cuenta los antecedentes médicos, la edad, el sexo, laraza, el tabaquismo, ejercicio, consumo de alcohol y la ingesta calóricadiaria. Durante del estudio, se produjeron 559 accidentes vasculares, entreellos infartos cerebrales hemorrágicos o isquémicos causados por la ruptura deun vaso sanguíneo debilitado.
Considerando los antecedentes anteriores, los investigadoresconcluyeron que existe relación entre el consumo de refrescos light y unmayor riesgo de sufrir este tipo de problemas vasculares. No obstante, senecesitan de otros análisis para determinar qué los provocas y sus posiblesconsecuencias.