Del pan no sólo vive el hombre así como la enseñanza no lo hace de lápices y cuadernos. Rápida revisión a algunos servicios que pueden servir -en tiempos de la Web 2.0- en las aulas de clases.

Por eso parece que lo más saludable es cortar la relación de entrega discreta entre alumno y profesor (donde sólo ambos -y quizás el que se copia- ven los trabajos) para hacerla mucho más pública, al menos donde los propios compañeros también puedan darse cuenta de lo que realizan los otros.
Como casi todo en la vida, esto tiene sus pros y contras, consecuencias y demás acciones que varían dependiendo del caso. Hagamos una revisión de los distintos escenarios a través de las herramientas en la Web que permiten hacerlo.
Facebook la madre de todas las redes sociales tiene diferentes elementos que permiten compartir y comunicarse más allá entre alumno-profesor. Los grupos es una manera de que el administrador pueda enviar un mismo mensaje a todos los registrados. También tiene la posibilidad de discriminar si se quiere una comunidad pública o simplemente algo privado entre la propia clase.
Quizás lo más relevante es que a través de las actualizaciones de estado se puedan incluir fotografías, videos o vínculos a otros sitios Web para así comentar, convirtiéndose así el espacio en un foro de discusión sin anonimatos, sin molestas inscripciones adicionales y usando una interfaz con la que más de uno se sentirá familiarizado.
La idea es incentivar al estudiante o al profesor para que publique de la manera más profesional posible y así no sólo tener un espacio con vínculos para compartir con todo y casillas para comentar, sino ir armando currículo. Entre más trabajos se den a conocer por esta vía, más experiencia se obtiene en todo lo que se le relaciona: diseño, programación, ortografía y redacción, entre otros elementos.
Prezi PowerPoint es un clásico, casi imprescindible, a la hora de hablar de herramientas para presentaciones en clase. Sin embargo, hay servicios más interactivos y útiles para presentar algún tema. Prezi es uno de ellos. Su interfaz es sumamente agradable y fácil tanto de mostrar como de utilizar, por lo que se erige como una gran alternativa (es decir, que ya al usarla se suma un punto en las exposiciones al no caer en el mismo saco de los demás en el material audiovisual).
Google Docs uno de los elementos más tediosos a la hora de corregir es el tiempo de espera entre la entrega del estudiante al profesor y viceversa. Cuando se hace por correo electrónico casi siempre pasa que se falla en una letra y no llega al destinatario o simplemente no se lee el adjunto.
Por eso Google Docs luce estupendo gracias a su función colaborativa. Esto quiere decir que ya no se recurre al rebote de correcciones si todos los involucrados se conectan al mismo tiempo y abren un documento editable.
La nueva versión del servicio añade un chat para ir comentando en tiempo real, además de que se puede guardar y compartir enla Web, con todo y enlace directo.
Delicious el sitio es un espaciodonde se pueden compartir y etiquetas vínculos de la Web. Si todo trabajo que se respete lleva bibliografía o fuentes bibliográficas, Delicious resulta perfecto, sobre todo si el contenido fue extraído de Internet.
Sin embargo, la verdadera utilidad sería para aquellos docentes que en su primera clase presentan el contenido de la materia. Aquí resulta útil para todo porque podrían hacer referencia a su cuenta (que termina personalizada) en vez de escribirlo en un papel.
Así se marcaría un enlace a dónde se puede conseguir los libros, alos artículos en la Web o hacia diferentes fuentes bibliográficas, todoorganizado por etiquetas (como “Objetivo 1” o “Tema 1”).
Podría seguir listando herramientas pero estas son las más conocidas y de no haber conocimiento previo, hay una cantidad inimaginable de tutoriales en la Web, lo que facilita su uso. ¿Creen que faltó mencionar alguna? Lacasilla de comentarios espera el respectivo aporte.
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