Ante su llegada al mercado, toca hacerle una breve revisión al nuevo objeto de deseo de la compañía de la manzana mordida. Cámaras y medidas reducidas entre las novedades.
Hablar de iPad a estas alturas es como dejar el arbolito de navidad en la sala hasta julio o quitar el pesebre en agosto. Disculpas por delante de las líneas sobre este aparato, aunque ante tanta memoria volátil en este país, vale echarle una sacudida para recordarlo.
Lo primero que hay que saber de la primera revisión de esta tablet es que no ha habido cambios profundos. Si este equipo fuera el cuerpo de una modelo, me atrevo a decir que en la cirugía le han rehecho las tetas, le pintaron el cabello y le pusieron…ojos.
Sí, la primera modificación visible es un añadido que ya consideró la competencia y que Apple viene incluyendo porque el público se lo demandaba: par de cámaras. La trasera graba en alta definición (a 720 p para ser específico) mientras que la delantera, al igual que muchos smartphones, termina siendo VGA.
Lo otro destacable es su diseño. El iPad 2 pesa 590 gramos y su grosor es de 8,8 mm. Esto se reduce hasta un 33% más esbelto que su antecesor. También se mantiene su aspecto metalizado, bordes curvilíneos y demás características de la primera versión.

El elemento diferenciador, lo que convierte el modelo anterior en una arepa con queso y este en una reina pepeada es justamente su interior, su potencia. El procesador que lo acompaña es el Apple A5, con doble núcleo y corriendo a 1 GHz de velocidad. Esto permite no sólo mejores y mayores gráficos (tan necesarios ahora que se ha incluido par de cámaras) sino que no consume más de las 10 horas conocidas para las baterías de este aparato.
Una de las principales quejas tanto al iPhone como al iPad ha sido su falta de conectividad mediantes puertos. Si bien no estamos viendo un despliegue, sí incluye una salida HDMI (de alta definición) con el que se espera que funcionen todas las aplicaciones del aparato.
En cuanto al software, trabaja con iOS 4.3 y mantiene una cantidad de programas que en parte esperábamos, como el Facetime para hacer uso de las cámaras.

De resto, vale decir que viene en “sabores” de 16 hasta 64 GB, así como en dos colores (blanco y negro) y que en Estados Unidos está desde el 11de marzo, pero el 25 de este mes llega a otras naciones en distintos continentes.
Sobre su precio, se mantiene inalterable e inaccesible, al menos para elbolsillo venezolano que tiene una limitación anual de 400 dólares para compras en Internet y que sólo de mencionar los posibles escenario de importación, merece deshidratarse por las lágrimas.
Lo que sí valdría resaltar es el fanatismo de medios y blogs sobre este aparato. Sí, podrá ser el pico del cerro tecnológico pero el simple hecho de lo que nos muestran hoy se vuelva obsoleto en menos de un año, ya es un abuso. Supongo que ese ciclo de vida dependerá de las opcionesque existan en el mercado y de la disposición de los compradores.
Para no aburrir más con el tema, quedan con un comercial del aparato en cuestión.
