Hace 50 años, Yuri Gagarin fue al espacio y orbitó la tierra. El joven cosmonauta de 27 años le dio una vuelta a la Tierra a bordo de la Vostok 1 durante 108 minutos.

Según lo reseñado por los medios soviéticos en aquel momento, Gagarin pronunció estas palabras en su travesía espacial: "Pobladores del mundo, salvaguardemos esta belleza, no la destruyamos jamás".
Durante el vuelo, las autoridades soviéticas que estaban cargo de la hazaña espacial creyeron que había una gran probabilidad de que Gagarin no sobreviviera al descenso y por su heroísmo decidieron promocionarlo del rango de Segundo Teniente a Mayor.
A las 10:20 de aquel día, Gagarin aterrizó en paracaídas en Tajtarova (Siberia) tras salir despedido de la cápsula del Vostok. Una campesina fue la primera persona en ver la silueta del cosmonauta recubierta por un mono naranja. «¿Vienes del espacio exterior?», preguntó la anciana. «Ciertamente, sí», dijo Gagarin que, para calmar a la campesina, se apresuró a añadir: «Pero no se alarme, soy soviético».
De regreso a la tierra, la hazaña de Gagarin lo convirtió en una personalidad y escribió su libro Veo la Tierra donde contó en su último capítulo:
Después de haber cumplido la misión espacial me era difícil pasear por las calles de Moscú y la Plaza Roja sin que nadie se fijara en mí y sin ser reconocido. La popularidad es una cosa irreparable. Uno se ve obligado a meditar ¿a qué y a quién se debe?
Un corresponsal extranjero me preguntó: ¿No le fastidia a usted, Gagarin, esa celebridad que se ha granjeado a partir del 12 de abril de 1961? Ahora, seguir. Tiene garantizado el descanso hasta los últimos días de su vida...
¿Descansar?, repliqué, aquí en la Unión Soviética, todos trabajan, y las personas célebres, Héroes de la Unión Soviética y del Trabajo Socialista, lo hacen con tanta mayor dedicación. Son miles en el país, y procuran trabajar lo mejor posible, sirviendo de ejemplo a imitar por los demás.
Después de los primeros vuelos espaciales el trabajo no menguó, al contrario, aumentó. Todos nosotros proseguimos estudiando. Profundizábamos nuestros conocimientos en cuanto a los vuelos cósmicos. No abandonamos el destacamento de cosmonautas, seguimos trabajando en las aulas y laboratorios, compartiendo las experiencias con los futuros cosmonautas.
Gagarín falleció el 27 de marzo de 1968, cuando el avión de caza MiG-15 que piloteaba durante un vuelo rutinario se estrelló cerca de Moscú.