Otro monumento religioso fue destruido, se trata de la estatua de la Virgen de Coromoto ubicada en el estado Portuguesa. Es el décimo acto de violencia hacia imágenes religiosas que se registra en las últimas semanas.
Aunque el hecho ocurrió el pasado viernes, la información fue revelada este miércoles por el párroco José Eusebio Urbina, en una entrevista en el periódico El Regional. "Un grupo de personas le mutilaron las manos a la imagen (...) es un crimen y una maldad a la sociedad católica del país", declaró el sacerdote.
Los actos delictivos están en investigación y, según lo que han declarado varias autoridades, ya se tienen pruebas que podrían revelar quiénes son los implicados. Mientras tanto, se trabaja para rehabilitar todos los monumentos destruidos.
