La chirimoya es una fruta exquisita y deliciosa, para muchos es un manjar, con un sabor dulce muy agradable. Se come directamente a cucharadas, partiéndola por la mirad y teniendo cuidado de no tragarse las pepitas. Nunca se le pone ni azúcar ni miel ni nata. Nada. Es dulce y no necesita otro ingrediente.
Tiene bastantes calorías, por lo que no es muy aconsejable si se desea perder peso. En cambio si deberían tomarlo los deportistas, niños, embarazadas, madres en periodo de lactancia, personas mayores, por su gran contenido en vitaminas. Cada vez se utiliza más en cocina y es frecuente verla en cada vez un mayor número de recetas.
El chirimoyo es originario de África y América. Procede de los Andes, de Perú y Ecuador. Existen vestigios prehistóricos en los que se comprueba que la Chirimoya ya existía en esos tiempos. Los navegantes españoles la llevaron a Africa y de allí, la llevaron a Oriente.
La chirimoya es una planta subtropical de la familia de las Annonacéas de del género de las Annonas. Es una fruta muy frágil, lo que ha provocado una limitada comercialización a nivel mundial. Principalmente se consume y produce en: Perú, Ecuador, Chile, Bolivia, Colombia, España, EEUU, Sudáfrica e Israel.
Las chirimoyas contienen un 75 % de agua, muchos hidratos de carbono (glucosa y fructosa), fibra, pero bastantes calorías debido al azúcar que lleva.
Las chirimoyas contienen:
- Vitaminas: A y C.
- Minerales: Potasio, Magnesio, Fósforo, Calcio, Hierro.
- Otros: Niacina, Riboflavina, Tianina, Ácido Fólico, Ácido Ascórbico, antioxidantes.
Propiedades y beneficios recomedadas para:
Transmisión y generación del impulso nervioso, actividad muscular.
- Colesterol.
- Problemas de tránsito intestinal, estreñimiento (gran poder laxante)
- Hipertensión.
- Problemas cardiovasculares.
- Celiaquía.
- Controla los niveles de azúcar en sangre.
- Anemia.
- Piel, vista, dientes, huesos, colágeno.
- Favorece la formación de glóbulos rojos y blancos.
- Situaciones de estrés.
- Baja de defensas.
Existen 800 especies de chirimoyos y 120 en especial del género de las Annonas. No existen demasiadas especies, porque es una fruta muy frágil de transportar y de poco aguante.
Las chirimoyas tienen una piel verde y por dentro una pulpa blandita y dulce muy suave, son deliciosas. El fruto contiene sus grandes petitas negras, que hay que sacar. Según la clase, tiene más o menos pepitas.
Consejos para su compra: Se sabe cuando las chirimoyas están maduras porque la piel pasa de verde oscuro a verde claro y está blandita. No debe de estar demasiado blanda. Si el rabo se desprende del fruto, es mala señal, quiere decir que está demasiado madura.
Conservación: Si la fruta está un poco verde, no pasa nada, se deja fuera de la nevera hasta que se madure.