El tromboembolismo pulmonar (TEP) es una condición patológica producida por la obstrucción de arterias pulmonares por causa de un trombo desarrollado in situ o de otro material procedente del sistema venoso (embolismo).

El tromboembolismo pulmonar se denomina al bloqueo de la arteria principal del pulmón o de una de sus ramas, por una substancia proveniente de cualquier otra parte del cuerpo, a través del torrente sanguíneo. Usualmente este bloqueo se debe al embolismo (objeto extraño es capaz de viajar por el torrente sanguíneo) de un trombo (coágulo) proveniente de las venas profundas en las piernas, un proceso denominado trombosis venosa profunda. Una menor proporción de estos casos se debe al embolismo de aire, grasas, talco en drogas intravenosas o fluido amniótico; en cuyo caso se denominaría simplemente embolia pulmonar o embolismo pulmonar.
El tromboembolismo pulmonar es una condición médica seria que puede causar daño permanente al pulmón afectado, bajos niveles de oxígeno en la sangre y daño a otros órganos del cuerpo que no reciben suficiente oxígeno.. La presencia de enfermedades autoinmunes aumenta el riesgo de padecer un tromboembolismo pulmonar.
La obstrucción del flujo sanguíneo a través de los pulmones y la presión resultante sobre el ventriculo derecho del corazón conllevan a los signos y síntomas del Tromboembolismo Pulmonar. Los síntomas pueden incluir dificultad respiratoria (disnea), respiración rápida (taquipnea), dolor de pecho (que empeora al respirar), tos (que puede incluir hemoptisis o sangrado), y palpitaciones. En casos más severos de Tromboembolismo Pulmonar se pueden observar signos como la coloración azul de la piel (cianosis) generalmente en uñas, mucosas y lechos ungueales debido a la deficiencia de oxígeno; también se puede producir causar el colapso y la inestabilidad circulatoria debido al decrecido flujo sanguíneo a través de los pulmones, así como del ventrículo izquierdo del Corazón. Cerca del 15% de los casos de muerte súbita son atribuibles al Tromboembolismo Pulmonar.
Tratamientos
Los tratamientos empleados frente al Tromboembolismo Pulmonar suele ser hospitalización, la terapía con oxígeno, medicamentos anticoagulantes (heparina, enoxaparina, dalteparina, fondaparinux, warfarina, acenocumarol, fenprocumon), filtros en la vena cava inferior, y la destrucción enzimática de los coágulos mediante medicamentos (trombolisis).
También existen procedimientos quirúrgicos como la trombectomía pulmonar (nuevas técnicas) y la tromboendarterectomía pulmonar para casos crónicos.
Este artículo es informativo y de ninguna manera debe considerarse como consejo profesional, visite a su médico para obtener diagnóstico y tratamiento.
2 comentarios
Mi pregunta es, esta actualmente disponible la heparina? me urge saber ya que el tratamiento con este medicamento es muy costoso.