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La apatía no es pereza

Si te sientes desganado, desmotivado, indiferente ante algo o todo, sin emoción, entonces estas experimentado apatía.

La apatía laboral disminuye tu rendimeinto.
La apatía laboral disminuye tu rendimiento.
La apatía puede presentarse en día aislado, donde adquieres un estado de ánimo impasible, donde predomina la ausencia de ganas o entusiasmo. La apatía podría estar haciendo que no goces del día a día.

Coloquialmente suele confundirse con la pereza. Suele presentar síntomas como:

-Cansancio.

-Aburrimiento.

-Tristeza.

-Vida social y afectiva casi nula.

-Insomnio.

-Pérdida del apetito.

-Poca capacidad de memoria y concentración.

-Desmotivación.

-Irritabilidad.

-Vida rutinaria.

Una persona apática suele dejar el trabajo sin culminar, esta ausente, no se concentra, su trabajo es mediocre, no muestra entusiasmo, es indiferente, camina encorvada, se mueve con pesadez, mira al suelo, sonríe poco; entre muchos mas rasgos que se pueden presentar.

Contrarrestarla.

Ve la vida con optimismo.
Ve la vida con optimismo.
Al contrario de lo que muchos piensan, la apatía no se debe a algo que haya ocurrido a nivel externo sino a una variable interna. Seguro que conoces a personas que tenían todo lo necesario para triunfar en sus vida y no lo han logrado y personas sin posibilidades externas que han conseguido éxitos con ganas, lucha y motivación.

Cambiar la rutina, práctica un deporte nuevo, pensar en positivo, cuidar la apariencia fisica, son técnicas que pueden alejar la apatía de tu vida.

Con tan sólo caminar erguido y sin arrastrar los pies, mirando al frente, simplemente eso, hace que la persona se sienta mejor. Sonríe, escucha un buen chiste, mira una película cómica, la risa es un remedio infalible contra la apatía.

Comienza trazándote metas pequeñas, a medida que las vallas logrando, notarás el cambio en ti.

Esfuérzate por ser feliz sólo depende de ti, tú eliges como quieres vivir.