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Estudio reveló que acostarse tarde y dormir pocas horas puede engordar

Un nuevo estudio sugiere que los adultos sanos que se acuestan tarde y tienen una restricción crónica del sueño pueden ser más susceptibles a aumentar de peso debido al incremento del consumo de calorías durante las horas nocturnas, uno de los hallazgos de esta investigación que publica la revista ‘Sleep’.

El estudio también encontró que los hombres durante la restricción del sueño ganaron más peso que las hembras.
El estudio también encontró que los hombres durante la restricción del sueño ganaron más peso que las hembras.
Los resultados muestran que el sueño restringido en sujetos que pasaron sólo cuatro horas en la cama, entre las cuatro de la madrugada y las ocho de la mañana, durante cinco noches consecutivas ganaron más peso que los sujetos de control que dormían diez horas cada noche, de diez de la noche a ocho de la mañana.
El estudio encontró un aumento global de la ingesta de calorías durante la restricción del sueño, que se debió a un incremento en el número de comidas que se consumen durante el periodo nocturno de vigilia adicional. Por otra parte, la proporción de calorías consumidas de grasa fue mayor durante las horas nocturnas que en otros momentos del día. Un nuevo estudio sugiere que los adultos sanos que se acuestan tarde y tienen una restricción crónica del sueño pueden ser más susceptibles a aumentar de peso debido al incremento del consumo de calorías durante las horas nocturnas, uno de los hallazgos de esta investigación que publica la revista ‘Sleep’.

La investigación se llevó a cabo en el Laboratorio de Sueño y Cronobiología del Hospital de la Universidad de Pennsylvania. El grupo de estudio incluyó a 225 individuos sanos, no obesos, con edades comprendidas entre 22 y 50 años, que fueron asignados al azar a la restricción del sueño o la condición de control y pasaron hasta 18 días consecutivos en el laboratorio.

Las comidas se sirvieron a horas precisas pero siempre tenían comida disponible en la cocina de laboratorio para los participantes que quisieran comer en otros momentos del día. Los sujetos podían moverse, pero no se les permitió hacer ejercicio, sino tan sólo ver la televisión, leer, jugar a videojuegos o realizar otras actividades sedentarias.

El estudio también encontró que los hombres durante la restricción del sueño ganaron más peso que las hembras y los afroamericanos subieron más de peso que los caucásicos.