Miguel Cabrera llega a su octavo Juego de Estrellas con las credenciales de ser el mejor bateador del juego

Turno a turno se incrementan los méritos para considerar a Miguel Cabrera el mejor bateador de esta era, razón suficiente para integrar por octava vez en su carrera el equipo de estrellas de su liga.

Ningún otro ganador de la triple corona había defendido su categoría de la manera como lo está haciendo el toletero venezolano de los Tigres de Detroit, quien llega a la pausa del Juego de Estrellas liderando dos de los departamentos que conforman la hazaña.

Cabrera llega con una línea (AVG/OBP/SLG/OPS) de .367/.458/.676/1.135, además de 30 jonrones y 95 remolcadas, cifras que lo colocan en la senda para revalidar su título de jugador más valioso de la Liga Americana.

Según ESPN Stat & Info, previo a las 81 ediciones del All Star Game, ningún pelotero había acumulado una línea ofensiva similar a la del bigleaguer criollo.

En la era pre Juego de Estrellas, Lou Gehrig logró en 1927 estos números: 397/.484/.839/1.313, con 29 vuelacercas y 102 remolques en la primera mitad del campeonato. Jimmie Foxx también acumuló .375/.475/.769/1.244, con 30 cuadrangulares y 93 impulsadas en la primera mitad de la temporada de 1932.

El antesalista de los Tigres está solo por debajo de Luis Aparicio (10) en participaciones en el clásico de mitad de temporada.