Las faltas de ortografía podrían pasar a la historia. Dos alemanes, Falk Wolsky y Daniel Kaesmacher, cansados de corregir los errores ortográficos de sus hijos, idearon un bolígrafo que vibra cuando el usuario comete una falta de ortografía o cuando la letra es ilegible.

El bolígrafo funciona en cualquier tipo de papel, mediante el reconocimiento de movimientos de la mano. Puede procesar palabras en inglés y alemán, pero sus creadores pretenden ampliar el rango de idiomas, así lo reseñó el diario ABC de España.
El lapicero funciona mediante el reconocimiento de los movimientos de la mano y puede procesar y detectar errores ortográficos y gramaticales en inglés y alemán, aunque sus creadores planean ampliar el rango de idiomas próximamente para incluír el francés y el castellano.
Las puntas del aparato, llamado por sus creadores Lernstift, son intercambiables —bola o estilográfica— y dispone de un sistema operativo de software Linux.