El secreto que envuelve la tan envidiada belleza de la Bella Durmiente no es más que el simple hecho de “dormir”.Descansar por los menos 8 horas diarias te hará ver y sentir más fresco, radiante y optimista.

Diversos estudios han determinado que las personas que duermen por lo menos ocho horas diarias poseen una mejor calidad de vida y son menos propensos a sufrir enfermedades degenerativas.
Por lo cual, un grupo de investigadores de la Instituto de Karolinska en Estocolmo, realizaron un estudio en 23 hombres y mujeres con edades comprendidas entre 18 y 31 años, a los cuales fotografiaron después de haber dormido por 8 horas.
Posteriormente, estos permanecieron despiertos durante 31 horas, en las cuales solo pudieron dormir 5 horas, para luego ser fotografiados.

Cabe destacar que el sueño logrado correctamente, no solo mejora el aspecto físico sino que también ayuda a restaurar el tono muscular y contribuye en la reparación de la degradación fisiológica que ocurre al transcurrir el día. De igual manera permite que la transpiración al dormir hidrate la piel de manera natural e incrementa el flujo de sangre a la cara, ayudando a disminuir las arrugas.
Por el contrario, la falta de sueño produce radicales libres que causan el envejecimiento prematuro. La piel pierde su brillo y lozanía natural tornándose opaca. Cuando no dormimos lo suficiente estas funciones se alteran.