Una vida acelerada crea ansiedad y hambre, y uno de los principales problemas a la hora de adelgazar es como controlar el apetito.
Diversos estudios han demostrado como las costumbres dentro de una misma familia y la influencia externa tienen más fuerza que la genética en nuestro comportamiento alimentario.
Controlar el apetito no significa dejar de comer, esto no tiene porque ser un suplicio, dejar de comer para bajar de peso ya paso a ser historia, lo importante es comer al menos 5 veces al dia pero de manera saludable.
El agua juega un papel fundamental si tomas un vaso antes de cada comida esto dará sensación de llenura y te ayudará a comer menos.
Concejos para controlar el apetito:
1.Mastica chicle. Muchas veces las ganas de comer algo no es hambre sino ansiedad. Mastica un inofensivo chicle sin azúcar para ayudar a que se te pase la intranquilidad.
2. Cuando veas televisión, en lugar de “picar” cosas que engordan, come una ensalada de lechuga, repollo o alcachofa, hojita por hojita.
3. Antes de asistir a una cena u otra reunión tentadora, es mejor que comas un huevo duro o un yogurt. Ayuda a disminuir el apetito.
4. Come fruta, una buena forma de saciar el hambre es comiendo fruta. Comer fruta con frecuencia nos ofrece altos contenidos de fructosa, que trabaja para recargar el glucógeno hepático, ayudando a evitar el hambre y controlar el apetito. Además,la fruta entrega muchas fibras, que mejoran el metabolismo. Intenta comerte la fruta entera, sin necesidad de procesarla en jugos tendrás tus beneficios.
5. Come mas fibras, consumir alimentos ricos en este compuesto puede ayudar porque cuando el estómago es estira, automáticamente se emiten señales que indican al cerebro que está lleno. Además, la fibra retarda el vaciado gástrico y la velocidad para digerir los alimentos. Así que a comer verduras ricas en fibras uno de los alimentos más ricos en fibra.
6. En el refrigerador guarda sólo alimentos que no engorden, como productos lácteos o quesos semidescremados, carne magra cocida, frutas o legumbres crudas, huevos, etc.
7. Desayuna siempre, mucha gente cree que saltarse comidas adelgaza. Sin embargo, varios estudios han comprobado que quien se salta el desayuno tiene mayor riesgo de obesidad y diabetes que quien desayuna a diario (¡no el café bebido!). Debes incluir proteínas magras (huevo, jamón, queso fresco, yogur descremado...), carbohidratos ricos en fibra (pan o cereales integrales), vitaminas (frutas y zumos) y pequeñas cantidades de grasas saludables (nueces o almendras)
8. Empieza todas las comidas con una ensalada verde
Si lo haces, acabarás tomando menos calorías. ¿Por qué? La lechuga, la escarola, las endibias... tienen mucho volumen y pocas calorías, y obligan a masticar, por lo que sacian el apetito. Eso sí, no te pases con el aliño: prepara la vinagreta en un bol y pon sólo la necesaria. Y si prefieres la cuchara, empieza con una sopa, que tiene más de un 80% de agua.
recuerda tomar al menos 2 litros de agua por día, el agua es vida.
Con información de: Colanta / MujerHoy/ VivirSalud