El editorial consiste en un texto de corte periodístico no firmado que explica, valora y juzga un hecho noticioso de especial importancia.

Estructura de un editorial.
En la editorial no se utilizan los párrafos introductorios, el espacio disponible es limitado y se afronta desde la primera frase el tema sobre el que se pretende opinar. Cualquier editorial suele contener:
- Una primera parte que enuncia y recuerda el tema.
- Una segunda en la que se desarrolla el análisis y la interpretación que suscita
- Consecuencias y conclusiones: se finaliza con una tercera con la presentación de una postura y una opinión concreta. Esta opinión puede formularse a modo de solución, pronóstico o crítica. En este tipo de artículos resultan especialmente decisivos, para conseguir el propósito editorializante, el primer y último párrafo.
Existen diversos tipos de editoriales en función del objetivo concreto que persiguen y también del contenido que tienen. En concreto, entre las clases mas significativas se encuentran las siguientes:
Editorial de tesis.
Editorial interpretativa.
Estilo de la editorial.
El editorialista goza de gran libertad expresiva sin olvidar la necesidad de ser claro y preciso. El estilo suele ser grave y digno, acorde con la importancia del tema tratado. Nunca se utiliza el yo personal del periodista que lo escribe ya que se expresa la opinión colectiva del periódico o revista.
El lenguaje empleado ha de ser expositivo o argumentativo, pero se evitará que sea demasiado complicado y demasiado autoritario. Hoy día los periódicos de gran tirada evitan adoptar posturas radicales y extremistas, dada la diversidad de sus lectores; procuran más bien interpretar o aclarar los hechos.
Con información de: Géneros Periodísticos / Definición