La misión de Great Place to Work, es la de construir una mejor sociedad, ayudando a las organizaciones a transformar sus lugares de trabajo.
Promover la confianza hacia los líderes, incentivar el orgullo por el trabajo y hacer que el colaborador disfrute las relaciones con sus compañeros, son factores vitales para construir un excelente ambiente.
Durante casi 25 años han reconocido a través de su metodología a las empresas con altos niveles de confianza alrededor del mundo, lo cual se traduce en contar con líderes creíbles, que respetan a las personas, no solo como colaboradores, sino como seres humanos que practican la imparcialidad.
Las empresas reconocidas como Grandes Lugares para Trabajar en el ámbito mundial se destacan por mostrar respeto por sus colaboradores y crear culturas de trabajo basadas en el sólido pilar de la confianza.

El compromiso de mantener relaciones confiables impregna todos los niveles de estas organizaciones, desde los altos directivos hasta los colaboradores, quienes acompañan los planes estratégicos, y ayudan a que los beneficios sean de gran alcance.
De esta manera, se superen los objetivos financieros y se incremente la posibilidad de retener el talento, de asumir riesgos y de innovar. En general, los mejores lugares de trabajo en todo el mundo compiten en un nivel muy alto similar.
En cuanto a la puntuación general del Trust Index, América Latina y Estados Unidos están en el mismo nivel con una puntuación de 86%, mientras que Europa es ligeramente superior en un dígito, con una puntuación global de TI de 87%.
Claves
Credibilidad: Mide el grado en el cual el colaborador ve la gerencia como creíble (digna de confianza) al evaluar las percepciones en cuanto a la comunicación, competencia e integridad de los líderes, lo que permite claridad entre la visión de la organización y la importancia del rol de los colaboradores en lograr los objetivos.
Respeto: Mide el grado en el cual el colaborador se siente respetado por la gerencia, al evaluar los niveles de apoyo, colaboración y cuidado que estos experimentan con las acciones de la gerencia hacia ellos, escuchando y respetando sus opiniones, reconociéndolos y, sobre todo, tratándolos como seres humanos, considerando a sus familias y preocupándose por su crecimiento profesional dentro de la organización.
Imparcialidad: Mide el grado en que los colaboradores perciben que las prácticas y políticas de gestión son justas, al evaluar la equidad, la imparcialidad y la justicia con la que son tratados y, por ende, se diferencian el lugar de trabajo.
Camaradería: Mide el sentido de las relaciones cordiales y amistosas entre colaboradores en el lugar de trabajo, evaluando la calidad de la fraternidad, la hospitalidad y el sentido de equipo. De esta manera es más fácil crear un sentido de comunidad y la sensación de formar parte de una familia.
Orgullo: Mide los sentimientos de los colaboradores, evaluando aquellos referidos a su trabajo personal, a su equipo de trabajo y a la empresa, a través de la conexión emocional que estos desarrollan, generando compromiso y disfrutando su grata experiencia laboral.
Finalmente para poder crear un ambiente de trabajo saludable y excelente, tome en cuenta cada una de estas claves que sin duda alguna son primordiales para el crecimiento personal y profesional de cada uno de los empleados, como para el crecimiento y gran potencialidad de cualquier empresa ya sea grande o pequeña.