A propósito de los 482 años de fundación de la capital zuliana, vale hacer una revisión de una serie de detalles prácticamente desconocidos hasta para (buena parte de) sus propios habitantes
Hoy cuando la capital del Zulia y la ciudad más importante del occidente venezolano celebra un nuevo aniversario, vale adentrarse en los libros de historia y revisar 4 datos que en su momento marcaron la pauta en la tierra del sol amada.
Botica Nueva: el primer ascensor de Maracaibo
Lo que fuese alguna vez una propiedad del General Rafael Urdaneta, en 1910 fue adquirida por los hermanos Belloso (cuyo negocio familiar hoy es Cobeca) y en 1925 lo inauguran como la Botica Nueva, primer edificio en Venezuela en contar con un ascensor y que a la fecha era considerado –con 4 pisos- como todo un rascacielos.
Autocine de El Milagro
Ubicado en la avenida El Milagro, el autocine o el “autocar” (como era conocido) era el punto de referencia para el entretenimiento durante los 60 y 70. Era al aire libre y por mantener espacio sólo para automóviles, generalmente era el sitio recurrente de los novios de la época.
Ferry de Maracaibo
Uno de los transportes prácticamente desaparecidos (tras las piraguas) ha sido el ferry.
A comienzos del siglo XX, Carlos D´Empaire comenzó a gestar una idea que no se concretó hasta la muerte de Juan Vicente Gómez en 1935.
En el carnaval de 1937 finalmente arriba el primero a Maracaibo bajo el nombre de Coquivacoa. Tiempo más tarde se les uniría Catatumbo, Caracas, Cabimas, Colón, Carabobo, Coro, Cordillera, Ceuta, Cumarebo y Cacique.
Desaparecen parcialmente en 1962 con la construcción del Puente sobre el Lago de Maracaibo pero se retomaron durante 8 meses tras el accidente del barquero Esso Maracaibo en 1964.
Los aguadores y el primer acueducto
Desde la propia fundación de Maracaibo, el agua era transportada por jóvenes que dejaban de ir a la escuela para recoger el líquido y depositarlas en aljibes (antiguos tanques subterráneos). Tiempo después se fue proveyendo con más ayuda, como la de un burro y las botijuelas, la vasija donde almacenaban el agua.
Con el pasar de los años se fundó una compañía que vendía agua dulce proveniente de los pozos de La Hoyada en la avenida Bella Vista (hoy la cancha deportiva del colegio Las Mercedes) y los aguadores modificaron el sistema que utilizaban sobre los burros utilizando cajones de maderas y latas de hasta 25 litros.