Todos conocemos su significado, su importancia y sus frutos. Por medio de la constancia podemos llegar a hacer grandes cosas, si nos proponemos, al comenzar desde abajo y poco a poco ir subiendo, llegaremos a cada una de las metas que nos hemos trazado.

Existen sociólogos que definen la constancia como “el grado de perseverancia que se aplica a un objetivo particular, para lo cual se hace oportuno la elaboración de un proyecto de vida, en el cual se establezcan metas definidas. Es una herramienta que debe ir tomada de la mano con otros valores, tales como la responsabilidad y la honestidad, para llegar a ser ciudadanos con roles que contribuyan a la transformación positiva de la sociedad”.
Definitivamente la constancia es un don, mejor dicho, una virtud que no todo el mundo posee. Es tener la capacidad de enfrentar las consecuencias y superar los obstáculos que traigan las decisiones antes tomadas, es ir en pro de lo que nos hemos planteado por alcanzar, sin importar qué. Si bien es cierto que dicho valor es de carácter individual, los resultados de convertir una acción en hábito, se observan claramente en el desarrollo social y colectivo.
Una característica propia de la constancia, es la comunicación. Es indispensable crear el hábito de comunicar un mensaje, ya que vivimos en una sociedad donde poco a poco se ha ido perdiendo la ejecución de los buenos modales, donde la comunicación interpersonal ha pasado a un segundo plano y no debería ser así. Comunicarse es ser constante, pero comunicarse para bien, para aprender o para enseñar, no para divulgar chismes y empobrecer moralmente una comunidad.
Cabe destacar que tanto sacrificio por medio de un valor, acarrea grandes frutos, por ejemplo la constancia genera la oportunidad de emprender un negocio y al seguir el mismo camino, conduce al éxito. Una de las claves es nunca desmotivarse, seguir adelante e intentarlo una y otra vez, pero cada vez con más ganas y buenas energías, nunca darse por vencido.
Realiza un mapa, en cual se vean implicados los proyectos y metas que quieras alcanzar. Evalúa tu entorno, los pasos que debas seguir para alcanzarlos, conviértete en una persona innovadora y audaz.